Es obvio que una persona
ciega o con deficiencia visual tiene dificultades para interaccionar con el
ordenador pero esto no es ningún impedimento para acceder a él. Por ello, veremos a continuación algunas ventajas que tienen en este mundo de la
tecnología.
Para iniciar al usuario es importante empezar guiándole sus manos
hasta los objetos con los que va a trabajar: impresora, teclado, ratón, etc.
nombrándole lo que toca e indicándole su función para que crea imágenes
mentales coherentes y adecuadas a los objetos.
Normalmente las personas con dificultades visuales suelen utilizar
con más frecuencia el teclado que el ratón, pues le resulta más fácil
seleccionar las distintas opciones de los programas mediante la combinación de
teclas. Por ejemplo: al abrir la tecla Windows se abrirá el menú Inicio y
mediante las flechas del cursor, podemos desplazarnos entre todos los submenús
y elegir la acción que deseemos con la tecla Intro. Si el usuario es ciego, al
utilizar el lector de pantalla, el sintetizador le irá leyendo las opciones de
teclas elegidas.
Por otro lado, si observamos el teclado de un ordenador, veremos
que hay unos indicadores luminosos, informándonos de funciones como: bloqueo de
mayúscula, bloqueo de números, etc. pero una persona con déficit visual tiene
dificultades para percibirlos, por ello, el programa de autoayuda ToggleKeys
produce un pitido para indicar que alguna de estas luces se ha activado y otro
diferente para avisar que se ha desactivado.
Por lo general, las personas con este tipo de discapacidad no
tienen problemas con el teclado, pero muchas de ellas prefieren utilizar el
sistema braille.
Con el dispositivo Portátil-Braille
podemos introducir datos en el ordenador empleando un sistema braille. Este
pequeño dispositivo, no llega a los 500 gramos de peso, puede conectarse al
ordenador como dispositivo de entrada con unas ocho horas de autonomía. La
información almacenada en este dispositivo puede ser leída posteriormente con
ayuda de dispositivos de salida como la línea de braille, el sintetizador de
voz, la impresora braille o un programa magnificador de imágenes y caracteres
si el usuario posee un resto visual. Su uso se va extendiendo porque los
usuarios pueden tomar notas en braille, leerlas, almacenar la información más
importante y volver a ella cuando sea necesario.
Es impresionante como ha avanzado la tecnología y como hace
posible que personas con algún tipo de discapacidad se integren en la sociedad
haciéndoles la “vida” más sencilla. Un ejemplo es el portátil-braille, si pensamos
en un estudiante, ellos/as pueden hacer los ejercicios en clase, imprimirlos
cuando sean necesario y entregárselos al profesor/a o, si lo desean,
almacenarlos en un disco y que el profesor/a lo revise posteriormente y les
entregue las correcciones, ya que estos equipos suelen ser compatibles con
cualquier ordenador o periférico que deseemos conectar como el módem o la
impresora. Hay que tener en cuenta que hoy en día tenemos que mejorar muchos
aspectos para que todos/as tengamos las mismas oportunidades pero unos de los
problemas, en mi opinión, es que no somos conscientes de las oportunidades que
ofrece la tecnología a este tipo de personas y por ello deberíamos informarnos
y formarnos para aprovecharla al máximo y hacer un uso decente de ella.
Fotografía
tomada de http://accesibilidadweb.dlsi.ua.es/?menu=tec-braille
Información
contrasta de Sánchez Montoya R.
No hay comentarios:
Publicar un comentario